Básico
La incontinencia urinaria (conocida popularmente como incontinencia urinaria) es la incapacidad de aprender o la pérdida de la capacidad de almacenar la orina en la vejiga de forma segura y de determinar cuándo se debe orinar. Se trata de una afección bastante común que, según las investigaciones, se estima que afecta a entre el 5 y el 25% de las personas; las cifras exactas son difíciles de determinar porque muchos enfermos no acuden al médico por vergüenza. Básicamente, se puede decir que las mujeres sufren incontinencia con más frecuencia que los hombres y que el número de casos aumenta con la edad.
Muchos de los afectados sufren no sólo físicamente, sino también emocionalmente por la indeseada pérdida de orina. Por vergüenza y miedo a que se descubra su estado, se alejan cada vez más de la vida social. Especialmente para los jóvenes que han crecido creyendo que la incontinencia sólo afecta a las personas mayores, la presión del sufrimiento es inmensa. Los afectados suelen intentar ocultar su estado durante varios años antes de buscar ayuda profesional. El gran estrés psicológico se manifiesta en frustración, nerviosismo y trastornos del sueño.
Las pérdidas involuntarias de orina pueden evitarse en algunos casos simplemente fortaleciendo los músculos del suelo pélvico (mediante un entrenamiento intensivo del suelo pélvico). También se utilizan medicamentos para tratar ciertas formas de incontinencia urinaria, y la cirugía es el último recurso. También existe una amplia gama de ayudas profesionales disponibles en farmacias y droguerías, como las plantillas, que permiten a los enfermos hacer su vida normal sin restricciones.