Básico
La sordera (latín: surditas) se define como una pérdida auditiva severa o una sordera completa. Se distingue entre sordera absoluta y práctica. La sordera absoluta significa que la persona afectada no puede percibir ningún sonido. Con la sordera práctica, es posible oír varios tonos y sonidos, pero en una medida demasiado pequeña para entender el lenguaje hablado.
La pérdida de audición no tiene por qué deberse a un daño en el órgano auditivo periférico (que incluye el oído externo, medio e interno). La causa también puede ser un fallo de los nervios cocleares (nervios auditivos) o de las áreas del cerebro responsables de la audición, así como ciertos trastornos psicológicos.