¿Consecuencia, causa o correlación: COVID-19 y niveles bajos de vitamina D?

Más allá del paralelo 42 norte, a mucha gente le resulta familiar la siguiente frase durante una estación concreta: "se acerca el invierno". Esto se debe a que no es infrecuente tener una deficiencia de vitamina D más grave durante el invierno. Ahora bien, también se sabe que las personas que tienen esa deficiencia son más propensas a tener un curso grave de la enfermedad si contraen el Sars-CoV-2. Sin embargo, esto no significa que la ingesta de vitamina D (por ejemplo, la contenida en las gotas Oleovit D3) proteja contra un curso grave de COVID-19.
Variedad de píldoras de vitaminas en cucharas de madera sobre fondo blanco con hoja verde, producto complementario y médico, superficie plana de legoshutterstock.com / 1989studio

Importancia y función de la vitamina D:

Un estudio reciente de la Universidad de Hohenheim (Alemania), publicado en la revista NFS Journal, analizó la relación entre la deficiencia de vitamina D y la COVID-19 como enfermedad concomitante en pacientes con Sars-CoV-2. Según el investigador principal, el profesor Hans-Konrad Biesalski, los síntomas de la enfermedad derivados de una deficiencia vitamínica influyen en la evolución de la enfermedad en los pacientes estudiados. Dado que la vitamina D no sólo es importante para el metabolismo de los huesos, sino que también desempeña un papel importante en nuestras células inmunitarias y en las reacciones de defensa del organismo, un mal funcionamiento de estas tareas proporciona una gran superficie de ataque para el virus que se propaga por todo el mundo.

Además, la vitamina D también puede inhibir los mensajeros proinflamatorios en su producción. Esto es de gran importancia porque una infección por Sars-CoV-2 puede ser aún más peligrosa si surgen complicaciones en el curso de estos mismos procesos inflamatorios. Según el profesor Biesalski, las consecuencias pueden provocar un síndrome de dificultad respiratoria aguda.

Pero se aconseja precaución, porque ya se ha destacado en el pasado que un bajo contenido de vitamina D, por ejemplo en el caso de la inflamación, no es necesariamente la causa de la enfermedad, sino quizás una consecuencia de la inflamación, según un estudio publicado en 2014 en la editorial científica Elsevier.

Según los estudios de la Universidad de Hohenheim, se puede detectar una deficiencia de vitamina D con una frecuencia superior a la media en las enfermedades y circunstancias vitales que aumentan el riesgo de COVID-19. Como ejemplo, se menciona una edad más elevada, así como la obesidad (es decir, la gordura) o la diabetes mellitus de tipo 2.

Observación:

Como las recomendaciones de vitamina D para prevenir la infección por el SARS-CoV-2 siguen apareciendo en las redes sociales, es importante reiterar aquí que el estudio no concluye a partir de los resultados que tomar vitamina D pueda prevenir dicha infección.

Sin embargo, hay que tener en cuenta que los niveles de vitamina D a menudo pueden reflejar el estado de salud del paciente, ya que la deficiencia de la vitamina y otras afecciones preexistentes a menudo pueden darse juntas.

Conclusión:

En consecuencia, no se puede aclarar del todo un favorecimiento de los cursos severos de COVID-19 por una deficiencia vitamínica. Sin embargo, según el estudio, el nivel de vitamina D podría servir como indicación de si existe un mayor riesgo de un caso de Covid-19 con un curso grave.

El investigador Prof. Biesalski recomienda que se determinen siempre los niveles de vitamina D en los casos de la enfermedad Covid-19. En el transcurso de la misma, un posible déficit debe ser corregido rápidamente para aliviar el curso de la enfermedad si es posible.

Demasiado de algo bueno:

Por el contrario, también existe la posibilidad de tomar demasiada vitamina D. Esto también puede ser peligroso, porque una dosis demasiado alta puede reducir la eficacia del sistema inmunitario. Además, la vitamina D también puede aumentar los niveles de calcio en el organismo. Según el Instituto Robert Koch, un exceso de calcio puede provocar efectos secundarios en forma de calambres abdominales, vómitos o incluso daños renales. Por eso es importante asegurarse de que se toma la cantidad adecuada de vitamina D.

¿Dónde puedo encontrar vitamina D?

Como ya se sabe, usted puede producir vitamina D en su propio cuerpo con la ayuda de la luz solar (luz UV). Varios alimentos, como los pescados grasos, los aguacates o las setas porcinas, también aportan mayores niveles de vitamina D. Como alternativa, la vitamina se comercializa ahora también en forma concentrada como comprimidos, gotas, etc., por ejemplo, Divisun, Oleovit D3 gotas.

Fuentes

Danilo Glisic

Danilo Glisic


Última actualización el 01.12.2020


Logo

Su asistente personal de medicamentos

Medicamentos

Explore nuestra extensa base de datos de medicamentos de la A a la Z, con efectos, efectos secundarios y dosificación.

Sustancias

Todos los principios activos con sus efectos, aplicaciones y efectos secundarios, así como los medicamentos en los que están contenidos.

Enfermedades

Síntomas, causas y tratamiento de enfermedades y lesiones comunes.

Los contenidos presentados no sustituyen el prospecto original del medicamento, especialmente en lo que respecta a la dosificación y los efectos de los productos individuales. No podemos asumir responsabilidad por la exactitud de los datos, ya que estos se han convertido parcialmente de forma automática. Para diagnósticos y otras preguntas de salud, siempre debe consultar a un médico.

© medikamio