Al igual que todos los medicamentos, este medicamento puede producir efectos adversos, aunque no todas las personas los sufran.
La mayoría de los pacientes toleran bien este medicamento pero algunos, especialmente al principio del tratamiento, se encuentran algo somnolientos o cansados durante el día.
Los efectos adversos que pueden producirse durante el tratamiento con este medicamento, y que se han observado con una frecuencia desconocida (no puede estimarse a partir de los datos disponibles) son:
Trastornos del sistema inmunológico: hipersensibilidad, angioedema (hinchazón en la cara).
Trastornos psiquiátricos: confusión, desorientación, alteraciones emocionales y del humor, trastornos de la libido (alteración del deseo sexual), depresión (el uso de este medicamento puede hacer aparecer una depresión que ya existía), intranquilidad, agitación, hiperactividad, nerviosismo, ansiedad, irritabilidad, conducta agresiva, ataques de ira, pesadillas, sueños anormales, alucinaciones, comportamiento inadecuado, dependencia física, síndrome de retirada y abuso.
Trastornos del sistema nervioso: somnolencia (sueño), dolor de cabeza, vértigos (alteración del sentido del equilibrio), disminución de la alerta (lentitud en los reflejos), ataxia (descoordinación de los movimientos voluntarios), sedación (después de una operación) y amnesia anterógrada (situación que se produce cuando no recuerda lo sucedido mientras estuvo despierto después de tomar el medicamento).
Trastornos oculares: diplopía (visión doble de los objetos).
Trastornos cardiacos: insuficiencia cardiaca (el corazón no bombea bien la sangre) y parada cardiaca (ataque al corazón).
Trastornos musculoesqueléticos y del tejido conjuntivo: debilidad muscular.
Trastornos respiratorios: depresión respiratoria (respiración lenta y de poca intensidad).
Trastornos gastrointestinales: alteraciones gastrointestinales.
Trastornos de la piel y del tejido subcutáneo: alteraciones cutáneas (alteraciones de la piel).
Trastornos generales y alteraciones en el lugar de administración: fatiga.
Lesiones traumáticas, intoxicaciones y complicaciones de procedimientos terapéuticos:aumento del riesgo de caídas y fracturas en pacientes de edad avanzada y pacientes que estén tomando a la vez otros sedantes (incluidas las bebidas alcohólicas).
Riesgo de dependencia
El uso de benzodiazepinas puede conducir a una dependencia. Esto ocurre principalmente tras la toma de forma ininterrumpida del medicamento durante largo tiempo. Para reducir al máximo el riesgo de dependencia deben tenerse en cuenta estas precauciones:
- La toma de benzodiazepinas se hará sólo bajo prescripción médica (nunca porque hayan dado resultado en otros pacientes) y nunca se aconsejarána otras personas.
- No aumentar en absoluto las dosis prescritas por el médico, ni prolongar el tratamiento más tiempo del recomendado.
- Consultar al médico regularmente para que decida si debe continuarse el tratamiento.
Si considera que alguno de los efectos adversos que sufre es grave o si aprecia cualquier efecto adverso no mencionado en este prospecto, informe a su médico o farmacéutico.
Abstinencia
Para intentar minimizar la aparición del síndrome de abstinencia/insomnio de rebote (dificultad para dormir de forma más intensa que al inicio del tratamiento), no debe interrumpir bruscamente la medicación sino reducir gradualmente la dosis, de acuerdo siempre con las instrucciones del médico.
Al cesar la administración puede aparecer insomnio, ansiedad, dolor de cabeza, diarreas, confusión, dolor muscular, cambios de humor e intranquilidad.
Comunicación de efectos adversos
Si experimenta cualquier tipo de efecto adverso, consulte a su médico o farmacéutico, incluso si se trata de efectos adversos que no aparecen en este prospecto. También puede comunicarlos directamente a través del Sistema Español de Farmacovigilancia de Medicamentos de Uso Humano: www.notificaRAM.es/. Mediante la comunicación de efectos adversos usted puede contribuir a proporcionar más información sobre la seguridad de este medicamento.