Siga exactamente las instrucciones de administración del medicamento contenidas en este prospecto o las indicadas por su médico o farmacéutico. En caso de dudas, pregunte a su médico o farmacéutico.
La dosis recomendada es:
Adultos y adolescentes a partir de 12 años tomar de 5 a 10 ml dependiendo de la intensidad de la tos, cada 4 horas si fuera necesario. No sobrepasar las 6 tomas en 24 horas.
También se puede tomar 15 ml cada 6 u 8 horas si fuera necesario.
La cantidad máxima que puede tomar en 24 horas es de 60 ml repartidos en varias tomas.
Uso en niños
Niños entre 6-11 años: tomar de 2,5 a 5 ml dependiendo de la intensidad de la tos, cada 4 horas si fuera necesario. No sobrepasar las 6 tomas en 24 horas.
También se puede tomar 7,5 ml cada 6 u 8 horas si fuera necesario. La cantidad máxima que se puede tomar en 24 horas es de 30 ml repartidos en varias tomas.
Niños entre 2-5 años: tomar de 1,25 a 2,5 ml dependiendo de la intensidad de la tos cada 4 horas si fuera necesario. No sobrepasar las 6 tomas en 24 horas.
También se puede tomar 3,75 ml cada 6 u 8 horas si fuera necesario.
La cantidad máxima que puede tomar en 24 horas es de 15 ml repartidos en varias tomas.
Niños menores de 2 años Este medicamento está contraindicado en niños menores de 2 años
Como tomar
Bicasan se administra por vía oral. Para tomar la cantidad correcta de este medicamento, utilice la cucharilla dosificadora (1,25 - 2,5 - 5 ml) que se incluye en el envase. Después de cada toma lavar la cucharilla dosificadora.
Se puede tomar con o sin alimento
No tomar con zumo de pomelo o de naranja amarga ni con bebidas alcohólicas (Ver apartado Toma de Bicasan con alimentos o bebidas).
Si la tos empeora, si persiste más de 7 días de tratamiento o si va acompañada de fiebre alta, erupciones en la piel o dolor de cabeza persistente, consulte con su médico.
Si estima que la acción de Bicasan es demasiado fuerte o débil, comuníqueselo a su médico o farmacéutico.
Si toma más Bicasan del que debiera
Si toma más Bicasan del recomendado podrá notar: Confusión, excitabilidad, inquietud, nerviosismo e irritabilidad.
La toma de cantidades muy altas, puede producir en los niños un estado de sopor, nerviosismo, nauseas, vómitos o alteraciones en la forma de andar.
Se han producido casos de abuso con medicamentos que contienen dextrometorfano, pudiendo aparecer efectos adversos graves como: ansiedad, pánico, pérdida de la memoria, taquicardia (aceleración de los latidos del corazón), letargo, hipertensión o hipotensión (tensión alta o baja), midriasis (dilatación de la pupila del ojo), agitación, vértigo, molestias gastrointestinales, habla farfullante, nistagmo (movimiento incontrolado e involuntario de los ojos), fiebre, taquipnea (respiración superficial y rápida), daño cerebral, ataxia (movimientos descoordinados), convulsiones, depresión respiratoria, pérdida de conciencia, arritmias (latidos irregulares del corazón) y muerte.
En caso de sobredosis o ingestión accidental, acuda a su médico o llame al Servicio de Información Toxicológica, (teléfono 91.562.04.20), indicando el medicamento y la cantidad ingerida.