Siga exactamente las instrucciones de administración de este medicamento indicadas por su médico. En caso de duda, consulte de nuevo a su médico o farmacéutico.
Dependiendo de su respuesta al medicamento, de la naturaleza de su enfermedad y de su peso, su médico le indicará la dosis correcta para usted, comenzando por una dosis inicial baja y aumentando poco a poco la dosis hasta conseguir el efecto deseado.
- Adultos: la dosis inicial no debe superar los 1,5 mg/día, divididos en tres tomas. Esta dosis se puede aumentar en 0,5 mg cada 3 días hasta que las convulsiones estén bien controladas o los efectos adversos impidan seguir aumentando la dosis. La dosis de mantenimiento debe ajustarse para cada paciente. Suele ser suficiente con una dosis de mantenimiento de 3-6 mg diarios.
Nunca debe superarse la dosis máxima de 20 mg diarios en adultos.
Para facilitar el ajuste de dosis, se recomienda la utilización de los comprimidos ranurados de 0,5 mg para los niños y adultos en la fase inicial del tratamiento.
Uso en niños y adolescentes
- Lactantes y niños menores de 10 años (o hasta 30 kg de peso): la dosis inicial es de 0,01-0,03 mg/kg/día, divididos en dos o tres tomas. Esta dosis se puede aumentar en 0,25-0,50 mg cada 3 días, hasta que las convulsiones estén bien controladas o los efectos adversos impidan seguir aumentando la dosis.
La dosis de mantenimiento aproximada es de 0,1 mg/kg/día.
Nunca debe superarse la dosis máxima de 0,2 mg/kg/día en los lactantes y niños menores de 10 años.
Para facilitar el ajuste de dosis, se recomienda la utilización de las gotas (1 gota=0,1 mg de sustancia activa) para los lactantes.
- Niños y adolescentes de 10-16 años: la dosis inicial es de 1-1,5 mg/día, divididos en dos o tres tomas. Esta dosis se puede aumentar en 0,25-0,5 mg cada 3 días hasta que se alcance la dosis de mantenimiento (por lo general, de 3-6 mg/día).
Como con todos los medicamentos para tratar la epilepsia, no debe suspenderse el tratamiento con Rivotril bruscamente, sino que debe reducirse de forma escalonada.
Normas para la correcta administración
Tome los comprimidos con agua u otra bebida no alcohólica.
El comprimido se puede partir en dosis iguales. Los comprimidos están ranurados para permitir la administración de dosis más bajas. Para dividir el comprimido, sostenerlo con la ranura hacia arriba y aplicar presión hacia abajo.
Si olvida tomar una dosis, nunca debe tomar el doble de medicamento cuando le toque la siguiente dosis. Simplemente continúe con la dosis habitual en la próxima administración de medicamento.
NO cambie la dosis indicada por su médico.
Consulte a su médico si cree que el efecto de este medicamento es demasiado fuerte o demasiado débil.
Duración del tratamiento
Su médico le indicará cuándo debe finalizar el tratamiento con Rivotril.
Este tratamiento puede durar toda su vida, por lo que si usted quiere dejar de tomar Rivotril, debe siempre consultar a su médico ya que dejar repentinamente el tratamiento puede provocar la aparición de síntomas de retirada como por ejemplo temblores.
Si toma más Rivotril del que debe
Los síntomas de sobredosificación o intoxicación varían sensiblemente de una persona a otra, según la edad, el peso y la respuesta individual al medicamento. Los síntomas pueden ir desde cansancio y mareo hasta ataxia (descoordinación de los movimientos voluntarios), somnolencia (sueño), falta de respiración, ausencia de reflejos, hipotensión (tensión baja) y estupor (baja respuesta a estímulos) y, por último, coma con depresión respiratoria e insuficiencia circulatoria. Pueden producirse convulsiones sobretodo en pacientes con concentraciones de medicamento en sangre por encima de las recomendadas.
El tratamiento de la intoxicación consistirá en monitorización (vigilancia estrecha) de la respiración, de la frecuencia cardiaca y la presión arterial; lavado gástrico, hidratación intravenosa, medidas generales de apoyo y medidas de urgencia en caso de obstrucción de las vías respiratorias. En caso de hipotensión (tensión baja), pueden administrarse medicamentos simpaticomiméticos.
Advertencia:
El medicamento flumazenilo (antagonista benzodiazepínico), no está indicado en los pacientes epilépticos tratados con benzodiazepinas. En estos pacientes, el flumazenilo puede provocar convulsiones.
Si usted toma más Rivotril del que debiera, contacte rápidamente con su médico o acuda al centro hospitalario más cercano. Lleve con usted el medicamento.
En caso de sobredosis o ingestión accidental, consultar al Servicio de Información Toxicológica, Teléfono 91 562.04.20.
Si olvidó tomar Rivotril
No tome una dosis doble para compensar las dosis olvidadas.
Si interrumpe el tratamiento con Rivotril
Al cesar la administración puede aparecer inquietud, ansiedad, insomnio, falta de concentración, dolor de cabeza y sudores. No se recomienda, en general, interrumpir bruscamente la medicación sino reducir gradualmente la dosis, de acuerdo siempre con las instrucciones del médico.
Si tiene cualquier otra duda sobre el uso de este medicamento, pregunte a su médico o farmacéutico.