Fluticasona Cipla se comercializa con dos presentaciones de distintas dosis para uso por vía inhalatoria. Su médico decidirá la dosis del medicamento que necesita. Siga exactamente las instrucciones de administración de este medicamento indicadas por su médico. En caso de duda, consulte de nuevo a su médico, enfermero o farmacéutico.
Utilización de este medicamento
- Fluticasona Cipla puede usarse con una cámara de inhalación Volumatic en el caso de los pacientes que tengan dificultad para liberar una dosis (pulsación) del medicamento justo después de empezar a inhalar.
- La dosis inicial será la indicada según la gravedad de la enfermedad. Su médico supervisará su tratamiento para disminuir la dosis hasta la dosis más baja que controle el asma de forma eficaz.
Adultos y adolescentes mayores de 16 años:
La dosis recomendada es de 50 a 500 microgramos dos veces al día.
Uso en niños
El uso de Fluticasona Cipla no está recomendado en niños menores de 16 años.
Si está usando dosis elevadas de corticoesteroides inhalados durante un periodo prolongado de tiempo, es posible que en alguna ocasión necesite más corticoesteroides, por ejemplo, durante situaciones de estrés como un accidente de tráfico o antes de una intervención quirúrgica. Es posible que su médico decida prescribirle más corticoesteroides durante estas situaciones.
Instrucciones de uso
Su médico, enfermero o farmacéutico deberán enseñarle a utilizar su inhalador. Periódicamente deberán comprobar cómo lo utiliza. Un uso no adecuado de Fluticasona Cipla o no utilizarlo como se le ha recetado puede tener como resultado que el asma no mejore como debiera.
El medicamento está envasado en un cartucho a presión, dentro de una carcasa de plástico con una boquilla. Para evitar que el inhalador se obture, es importante que lo limpie una vez a la semana como mínimo.
Comprobación del inhalador
- Antes de usar por primera vez el inhalador, compruebe que funciona adecuadamente. Quite el protector de la boquilla, apretando suavemente los laterales con el pulgar y el índice y retírelo.
- Para comprobar que el inhalador funciona correctamente, agítelo bien, dirija la boquilla lejos de usted y pulse el cartucho para liberar al aire cuatro pulsaciones. Cuando no haya utilizado el inhalador durante una semana o durante un período más prolongado, libere dos pulsaciones al aire.
Utilización del inhalador
Justo antes de usar el inhalador, debe empezar a respirar lo más lentamente posible que pueda.
- Puede hacerlo tanto de pie como sentado.
- Retire el protector de la boquilla. Inspeccione el interior y el exterior de la boquilla, para comprobar que está limpia y que no contiene partículas (figura A).
3 Agite el inhalador 4 o 5 veces para asegurar la eliminación de cualquier partícula extraña y que el contenido del inhalador se mezcla adecuadamente (figura B).
4 Sujete el inhalador en posición vertical con el pulgar situado en la base, por debajo de la boquilla. Expulse todo el aire de los pulmones que le sea posible (figura C). No inspire todavía.
4 Coloque la boquilla del inhalador entre los dientes, y cierre los labios alrededor de la boquilla. No la muerda.(ver la figura D).
5 Inspire por la boca y, justo después de empezar a tomar aire, pulse la parte superior del cartucho para liberar una dosis del medicamento. Siga inspirando profundamente y de forma constante (figura D).
7 Contenga la respiración, retire el inhalador de la boca y retire el dedo de la parte superior del inhalador. Siga aguantando la respiración durante unos segundos o tanto como le sea posible (figura E).
8 Si el médico le ha indicado que se administre dos inhalaciones, espere aproximadamente medio minuto antes de aplicar otra inhalación y repita los pasos del 3 al 7.
9 Después, enjuáguese la boca con agua y escúpala. Esto puede ayudarle a prevenir ciertos efectos secundarios en la boca y en la garganta. También puede cepillarse los dientes.
10 Justo después de usar el inhalador, vuelva a colocar siempre el protector de la boquilla para que no coja polvo. Vuelva a colocar el protector, empujándolo firmemente hasta que oiga un clic al colocarlo en su posición.
Es aconsejable que practique delante del espejo las primeras veces. Si observa la salida de una especie de «neblina» de la parte superior del inhalador o por las comisuras de la boca, debe comenzar de nuevo.
Puede ser de utilidad, para los niños más mayores o las personas que tengan poca fuerza en las manos, sujetar el inhalador con las dos manos. Coloque los dos índices en la parte superior del inhalador y los dos pulgares en la parte inferior, por debajo de la boquilla. Su médico, enfermero o farmacéutico le indicarán cómo hacerlo.
Limpieza del inhalador
Para evitar la obturación del inhalador, debe limpiarlo una vez a la semana como mínimo.
Para ello:
- Retire el protector de la boquilla.
- No saque el cartucho metálico de la carcasa de plástico.
- Limpie el interior y el exterior de la boquilla y de la carcasa de plástico con un paño seco o un pañuelo de papel.
- Vuelva a colocar el protector de la boquilla.
No sumerja el cartucho metálico en agua.
Si usa más Fluticasona Cipla del que debe
Si ha usado una dosis mayor de la recomendada, consulte a su médico lo antes posible.
Es importante que tome la dosis indicada en la receta o como le haya indicado su médico. No aumente o reduzca la dosis sin consultárselo primero a su médico.
En caso de sobredosis o ingestión accidental, consulte inmediatamente a su médico o farmacéutico o llame al Servicio de Información Toxicológica, teléfono 915 620 420, indicando el medicamento y la cantidad ingerida.
Si olvidó usar Fluticasona Cipla
- Tome su siguiente dosis cuando esté previsto.
- No tome una dosis doble para compensar la dosis olvidada.
Si interrumpe el tratamiento con Fluticasona Cipla
No interrumpa su tratamiento, aunque se encuentre mejor, a menos que se lo indique su médico. Los pacientes que han estado en tratamiento con dosis elevadas de corticoesteroides durante un período prolongado de tiempo no deben dejar de tomar el medicamento sin consultárselo primero a su médico, ya que su asma podría empeorar. La interrupción brusca del tratamiento también puede hacer que sienta malestar y puede provocar síntomas como vómitos, adormecimiento, náuseas, dolor de cabeza, cansancio, falta de apetito, disminución de las concentraciones de glucosa en sangre y convulsiones.
Si tiene cualquier otra duda sobre el uso de este medicamento, pregunte a su médico, enfermero o farmacéutico.